miércoles, 3 de abril de 2013

Capitulo 79 y 80


Capitulo 79

— ¿Me vas a contar que te pasa?— pregunto abriéndome la puerta del auto.
—No Pablo— rodé los ojos y subí al auto —Solo vámonos ya por favor.
—Como tú digas. — sonrió y rápidamente rodeo el auto para subir del lado del piloto.

— ¿Y Lanzani?— pregunto rompiendo el silencio. Una lágrima se deslizo pero rápidamente la limpie.
—Te agradecería que dejaras de hacerme preguntas— dije sin siquiera voltear a verlo. Seguía con mi mirada hacia la ventana.
—Lo siento, solo que no te vez bien y el auto de él estaba afuera ¿Se enojaron? — rodé los ojos, estaba por decirle que me bajara ahí cuando mi celular vibró. La pantalla indicaba que era Peter quien llamaba. Incline la cabeza haciendo que mi cabello cubriera mi rostro ya que no podía resistir más y las lágrimas tomaban sus propias decisiones. Me debatía en desviar la llamada o solo no responder. Me decidí, solo no respondería. Guarde de nuevo el celular en mi bolso y disimuladamente limpie las lágrimas de mi rostro.
— ¿Que ha sido tan malo para que derrames lagrimas por él?— volteé a verlo sorprendida. No esperaba que se diera cuenta. —Te conozco muy bien ¿recuerdas? — tomo mi mano y la soltó dándome mi espacio, acción que agradecí inmensamente.
—No tiene importancia— susurré y una vez más regrese mi mirada hacia la ventana.
Afortunadamente no pregunto más y tampoco el celular vibro más.
—Aquí — le dije señalando.
— ¿Qué?— dijo más que sorprendido
—Que aquí está bien, aquí déjame— aclaré. Ya que podía ser malinterpretada.
—No te dejare en este hotel de cuarta— dijo con repulsión. De hecho yo no estaba muy contenta pero digamos que no traía el efectivo suficiente para uno mejor y no traía mi cartera.
—No te estoy preguntando si me dejas quedarme o no…
—No sé qué mierda te hizo Lanzani, pero yo no te dejo aquí— me interrumpió y continúo conduciendo. —Tú casa o la de Peter— pero que magnificas opciones me dio.
—Regresa al hotel— dije cruzándome de brazos —No iré a ninguno de esos dos lugares.
— ¿Entonces?— exhalo con fastidio —Ni pienses que te dejare en uno de esos lugares—se refería al hotel, no respondí. —Bien ¿no elegirás alguno?— negué con la cabeza. —Perfecto. — rodo los ojos y volvió a mirar el camino.

—Gracias por nada Pablo— dije cerrando con fuerza la puerta del auto, odiaba que hiciera eso.
—Aun sigo detestando que hagas eso— dijo como si leyera mentes.
—Da lo mismo— acomode mi vestido antes de comenzar a caminar por la calle.
— ¿A dónde crees que vas?— pregunto retóricamente
—No voy a quedarme en tu casa, iré a buscar un hotel— seguí caminando y un fuerte viento me hizo temblar y enmaraño mi cabello. Maldije con ganas de tirarme al piso y llorar hasta quedar seca.
—No seas ridícula y entra ya— me gire y lo vi caminando hacia la puerta. ¿Qué más haría? No tenía a donde ir... una vez más. Tal vez no había sido del todo bueno vivir con Peter.

Tenía ya mucho tiempo de no entrar a la casa de Pablo, muchos recuerdos llegaron a mi mente haciéndome estremecer aun mas que el frio viento de afuera.
—Dormirás en mi habitación— dijo mientras subíamos las escaleras —Toma de mi armario la ropa que necesites, yo estaré en la sala. — abrió la puerta y se hizo a un lado para que entrara.
— ¿No saldrás?— pregunte ya que apenas llego a la fiesta y lo hice regresar.
—No— negó con la cabeza —Cámbiate y si tienes hambre baja.
—Quisiera ducharme…
—Pues hazlo— dijo obvio, me sonrió y salió de la habitación.
Apenas se cerró la puerta y me desplome en la cama, en automático las lágrimas brotaban como si no tuvieran fin. ¿Cómo podía haberme hecho eso? ¡Y con Mary! Tal vez yo me había equivocado en el pasado pero eso no le daba el derecho de acostarse con cualquiera… y mucho menos con mi peor enemiga. Me dolía el pecho. Era el mismo dolor que me había atormentado cuando Peter había dicho que no quería volver a verme. La herida que se había cerrado ahora se había abierto y peor que la última vez. ¿Por qué Peter?… era lo único que podía susurrar entre llanto. ¿Por qué siempre había algo? Siempre había algo o alguien impidiendo lo nuestro. ¿Por qué? ¡Joder!

Haciendo un gran esfuerzo me puse de pie y camine hacia el closet, tome una playera y un short. Lo deje en la cama antes de entrar al baño.

Después de una larga ducha salí y coloque cada prenda en su lugar, solo batalle un poco con el short ya que lo ponía en su lugar pero parecía que este prefería estar en mis tobillos. Me los quite y busque otros que trajeran cintilla para poder ajustármelos.

Termine de cepillar mi cabello, mire el reloj que estaba en la cómoda de al lado de la cama. Una de la madrugada. Dos golpes en la puerta me hicieron sobresaltarme.
—Pasa— dije suponiendo que era Pablo.
—Traje pizza— dijo entrando con la caja —Pero tardaste mucho y ahora esta fría— rio haciendo una mueca graciosa.
—Es mejor fría— me senté en la cama.
— ¿Me invitas a cenar?— mordió su labio inferior con nerviosismo.
— ¿De qué es la pizza?— lo mire con ojos finitos
—Pepperoni y queso extra— sonrió confiado —Tu favorita.
—Entonces si puedes quedarte— ambos reímos.
Comenzamos a platicar, en momentos lograba distraerme lo suficiente haciéndome olvidar todo. Pero de un momento a otro la imagen del baño nublaba mis pensamientos, atiborrándome de unas inmensas ganas de llorar y llorar. ¿Pablo lo sabría? ¿Pablo sabría que su novia estaba desnuda sobre mi semidesnudo novio?
—Pablo…
— ¿Si?
—Tú sigues con Mary ¿cierto?— me atreví a preguntar
—No
— ¿No?—
—No— respondió como si nada dando una mordida al trozo de pizza
—Y… ¿Se puede saber por qué?— pregunte disimuladamente
—Lali — suspiro —Me di cuenta de que ella solo me quiso por alejarme de ti— negó con la cabeza mirando hacia abajo —Y para ser sincero…— se acerco un poco a mi —…Jamás pude olvidarte— sentí mis mejillas arder, en estos momentos no tenía ni la menor idea de cómo reaccionar. —Te sonrojaste— dijo sorprendido y rio mientras acariciaba mi mejilla.
—Déjame— me cubrí riendo
—No sabes cuánto envidio a Lanzani— tomo mi barbilla para mirarme a los ojos -...saber que esos labios fueron míos— los delineo con suma delicadeza y mis ojos en automático se cerraron —...Y que deje que ahora otro se adueñara de ellos— sus caricias bajaron por mi mejilla hasta mi cuello y de un momento a otro sus labios estaban sobre los míos.
Lo hacía con inseguridad, con temor a mi reacción. Y por más que mi conciencia gritaba 'Detente, Detenlo' mis brazos la ignoraron y pasaron por su cuello formando con mis manos un nudo en su nuca.
Solo escuche el sonido de la caja de la pizza al caer en el suelo y sin separarme de sus labios me hinque en la cama para hacerlo recostarse y acomodarme sobre él.



Capitulo 80


 *Cuenta Peter

La puerta se abrió dejando entrar luz y permitiéndome ver el rostro de la impostora. 'Date un tiro Lanzani' exactamente esas cuatro pasaron por mi mente y se recalcaron al escuchar la voz de Lali disculparse por haber interrumpido. Pero de un momento a otro se cayó avergonzada pero levanto la mirada y se encontró con mi rostro de imbécil. -Mierda Peter REACCIONA!- Por alguna estúpida razón seguía en shock y la imprudente de Mary no se quitaba.
Extraña fue la reacción de Lali , yo esperaba que me gritara, que me insultaran incluso una cachetada... Pero al contrario sus ojos se cristalizaron y solo negó con la cabeza antes de irse corriendo. Esto no era nada bueno.
— ¿Qué rayos pasa contigo? — grite exaltado reteniendo mis ganas de empujarla, después de todo era una mujer.
—Parece que no conoces tan bien a tu ex novia— puso sus manos en mi abdomen tratando de provocarme, pero todo lo que sentí fue repulsión.
—Yo no perderé a Lali por culpa de...— una cualquiera como tu —…Por culpa tuya. — corregí, la moví a un lado y rápido tome mi playera del piso.
— ¡De los dos Lanzani! ¡Fue culpa de los dos! — escuche su carcajada a lo lejos ya que había salido corriendo detrás de MI novia.
Cruce el umbral de la puerta y vi mi chaqueta tirada pero no había señales de Lali. Pase mi mano con desesperación por mi cabello, ahora si ya estaba organizado mi funeral.
Regrese entre empujones para tratar de encontrar a Gaston. El sin duda alguna sabría donde estaba.
—¿Donde esta Lali?— dije sujetándolo de la camisa demostrándole que a la primera mentira lo haría polvo.
—No lo sé— me empujo — ¿Qué sucedió?—pregunto sorprendido, realmente no tenía idea.
—Solo necesito encontrarla ahora— volví a abrirme paso entre la multitud hasta que llegue afuera. Busque desesperadamente en mis bolsas hasta que encontré mi celular.
— ¿Has visto a Lali? — pregunto Gaston a un rubio que platicaba animadamente con otros chicos recargado en un auto.
El teléfono timbraba, lo tenía encendido pero no respondía.
—Si— contesto el chico atrayendo mi atención pero aun asi no separe mi celular del mi oído. —Hace poco salió corriendo…— me miro —No se veía bien— ¡claro que no se veía bien imbécil! —...Y luego se fue con Pablo. — baje el celular, tratando de canalizar mi ira pero era imposible. Apretaba mi celular con tanta fuerza que se escuchaba crujir por dentro.
— ¡Mierda!— grité con rabia antes de estrellar el aparato contra la pared.
— ¡Hey!
— ¡Cállate!— le ordene a Gaston con rabia.
—Mira imbécil de nada te sirve desquitarte con el celular, con mi pared o conmigo— me empujo hacia la calle ya que todas las miradas estaban en nosotros — ¿Qué sucedió? — preguntó ya que todos volvieron a lo suyo.
—Que jodidos te importa— bramé
— ¡Me importa mucho! ¿Qué hiciste para que Lali se fuera con Mary?— grito —Agradece que estoy tratando de ayudarte idiota.
—Nada, solo fue un mal entendido y…
—Especifica. — baje la mirada
—Yo… estaba en el baño con Mary…— cubrí mi rostro con frustración como había podido ser tan estúpido para confundirla.
— ¡Eres un imbécil Lanzani!— quite mis manos de mi rostro y recibí un golpe en la mandíbula —Como pudiste hacerle eso— me empujo fuertemente y aun algo aturdido por el golpe me tambalee hacia atrás chocando con un auto. Sacudí un par de veces la cabeza incorporándome y me le abalancé rápidamente y lo tome de la camisa haciéndolo girar y estrellándolo contra el mismo auto activando la alarma de este. Con mi mano derecha lo tome por el cuello como si fuera a estrangularlo.
— ¡Agradece que Lali me pidió que fuera amable contigo! si no ¡Dejas de respirar!— lo apreté fuertemente y comenzó a cambiar de color, quería reír pero no era el momento. Relaje mi mano no iba a matarlo aun que se lo merecía por idiota —Fue un mal entendido, Mary lo hizo intencionalmente me hizo creer que era Lali y… ¿Por qué te estoy dando explicaciones?— lo solté con brusquedad
Comenze a caminar hacia mi auto mientras buscaba las llaves en mis bolsillos. Quería reír al escuchar los tosidos de Gaston atrás pero no estaba de humor.

¿Por qué con Pablo? Habiendo tanta gente en el mundo tuvo que irse con Pablo. ¿Lo hacía por venganza? ¿Sería capaz de vengarse usando a Pablo? Si ella ya tenía antecedentes de usar a las personas… ¿Por qué no volver a hacerlo?


14 comentarios:

  1. peter merece que lali este con poli que se vuelva lka fria de antes, no me jodas no te podes confundir asi mery 1metro setenta y lali 1 50 !!!!! ajajjaja

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  2. mas mas mas mas otro otro otro

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  3. mas mas mas mas otro otro o

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  4. porqueee que mala Mery!!!! Aii que le cuente.todo y se arreglen!!

    mas.porfiiis

    @laliteronfire

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  5. lloreee, como me puedes hacer esto!!
    me encanto
    otrooo
    besos!!

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  6. K injusto k es.Sabe k no tiene amigas.

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  7. mas me encantaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa

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